TRAS LA CÁMARA

JON SANTAMARIA

FOTÓGRAFO DE BODAS EN SAN SEBASTIÁN

Soy Jon Santamaría, y me definen la curiosidad, la inquietud y las ganas de aprender. Estas cualidades las he cultivado a lo largo de los años, gracias a mi pasión por viajar y descubrir nuevas culturas, personas y sabores. Cada experiencia me ha ayudado a enriquecer mi forma de ver la vida y, por supuesto, mi manera de entender la fotografía.

Sin embargo, lo que más disfruto es pasar tiempo con mis pequeñas y mi compañera de vida. Ellas son mi mayor fuente de energía e inspiración diaria.

Cuando se trata de reportajes de boda, valoro cada oportunidad como una forma de conectar con las parejas. Creo un ambiente cercano y relajado para que, en el momento de capturar sus momentos únicos, puedan mostrarse tal como son, sin reservas.

Mi pasión por la fotografía de bodas comenzó al adentrarme en este mundo, aprendiendo de grandes referentes que me ayudaron a encontrar mi propio estilo. Hoy, mi objetivo es inmortalizar vuestra historia de una forma auténtica y llena de emociones reales.

MI MUNDO

Un poco más sobre mi

Me dedico a capturar momentos especiales y transformarlos en recuerdos que puedas revivir una y otra vez. Cada boda tiene su propia magia, y para mí es un privilegio poder reflejar esa autenticidad en imágenes que sean elegantes, atemporales y llenas de vida.

Disfruto explorando cada detalle, buscando la luz perfecta y componiendo cada escena para contar vuestra historia de una forma única. Más allá de las fotografías, quiero que sientas una conexión con esos instantes y que cada imagen te transporte al cariño, la alegría y las emociones vividas en ese día tan importante.

Si estás buscando fotografías que hablen de vosotros tal como sois, estaré encantado de acompañaros en esta aventura.

MIS MOMENTOS FAVORITOS EN UN DÍA DE BODA

1. Los preparativos: la magia de los pequeños detalles

Es el comienzo de un día lleno de emociones. Los nervios, las risas espontáneas y los gestos llenos de complicidad entre amigos y familiares crean un ambiente único. Me encanta capturar esos pequeños detalles: la última mirada al espejo, los retoques finales y las manos temblorosas al ajustar los complementos. Son momentos íntimos que cuentan mucho de vuestra historia.

2. El “sí, quiero”: emociones al descubierto

El instante en el que todo cobra sentido. Las miradas que se cruzan, las lágrimas contenidas y los suspiros de quienes os acompañan lo convierten en uno de los momentos más especiales. Es donde las emociones se desbordan, y mi objetivo es reflejarlas de la forma más auténtica y natural posible.

3. La celebración: risas, abrazos y pura felicidad

Después de la ceremonia, la energía cambia. Las sonrisas se multiplican, los abrazos se hacen más cálidos y cada invitado se une a la celebración de vuestro amor. Me encanta capturar esos instantes llenos de vida: los bailes improvisados, los brindis emocionados y cada gesto que muestra la alegría del momento.

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